En el crepúsculo de una leyenda del cine mexicano, se alza una grabación que sacude los cimientos de la admiración. Silvia Pinal, ícono inigualable de nuestra cultura audiovisual, parece haber sido víctima no sólo de la inevitable fragilidad del tiempo, sino del silencio impuesto por quienes debían cuidarla.
A casi un año de su fallecimiento, surgió un audio inédito difundido por el espacio de Maxine Woodside en el programa “Todo para la mujer”, donde se revela una conversación nocturna entre la actriz y una de sus enfermeras. En la grabación se escucha:
“¡Silencio!”, exige la enfermera.
“¿Qué?”, responde Pinal con voz débil.
“Usted, señora Pinal, hable y hable y los de al lado están durmiendo. Ya duérmase…”, insiste la cuidadora.
Este episodio abre preguntas incómodas: ¿Por qué no se denunció públicamente en su momento? ¿Cómo puede una de nuestras grandes figuras terminar sus días sin que su voz tenga plena legitimidad para expresarse? Según los reportes, la grabación data de diciembre de 2022, cuando el estado de salud de Pinal ya se encontraba frágil.
El legado de Silvia Pinal es inmenso: actriz, productora, símbolo de la Época de Oro del cine mexicano. Pero esa grandeza no la exime del cuidado que merecía como persona. En este caso, la grabación que hoy circula plantea un doble llamado: por un lado, al respeto y dignidad hacia quienes envejecen; por otro, a la fiscalización, supervisión y profesionalismo en los servicios de cuidados geriátricos.
Los medios coinciden en que la autenticidad del audio no ha sido confirmada oficialmente por la familia de Pinal. Aun así, su divulgación ya detonó indignación en redes sociales, amplificándose como tema de conversación en tiempos donde los cuidados a la tercera edad y la vigilancia de personal de asistencia toman relevancia social.
