Gerardo Fernández Noroña, presidente de la mesa directiva del Senado, apuntó que la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de abrir la puerta a la revisión de si tiene facultades para revisar controversias sobre la reforma al Poder Judicial es una “actitud facciosa”.
“Hago un llamado a los integrantes de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, y particularmente a la ministra Norma Piña a detener su conducta facciosa. A no dar un paso más en la conducta irresponsable que han tenido en este momento”, apuntó Noroña en conferencia de prensa este jueves.
Noroña consideró que si la Suprema Corte revisa controversias sobre la reforma judicial estaría pasando por encima del Poder Ejecutivo, el Legislativo y “el soberano, que es el pueblo”, además de que ello detendría el proceso electoral que ya inició en el Instituto Nacional Electoral (INE).
“Es una provocación mayúscula, y los pone a ellos fuera de la ley, y fuerza a tomar decisiones sobre las implicaciones legales de su comportamiento. ¿Quién se creen, qué les pasa, quieren llevar a la República a una crisis”, cuestionó.
Aunque destacó que Sergio Gutiérrez Luna, presidente de la mesa directiva en la Cámara de Diputados, ha expresado que debe haber juicio político contra los ministros y ministras, el senador del PT se pronunció por apostar por la serenidad.
“Creo que es el momento para volver al 1 de octubre, a la serenidad, a la actitud republicana, al respeto entre poderes…No los vamos a destituir”.
Afirmó que el Senado seguirá con la emisión de la convocatoria para la elección de jueces, ministros y magistrados, y “diga lo que siga la Corte nosotros vamos a hacer la elección”.
Apenas el miércoles, Fernández Noroña informó que usaría el teléfono rojo para pedirle a la ministra Piña que ya entreguen la información de todos los juzgadores que integran el Poder Judicial, para poder emitir la convocatoria de cargos a elegir.
En contraste, el panista Ricardo Anaya celebró que la Corte vaya a iniciar este análisis.
“Nosotros celebramos que la Corte haya tomado la decisión de entrar al estudio, y lo que nos parece profundamente preocupante son las expresiones de los integrantes justamente del oficialismo, que, de antemano, ya están descalificando cualquier resolución que emita la Suprema Corte de Justicia de la Nación”.
Lo anterior en referencia a las palabras de la ministra Lenia Batres, que usó el concepto de “golpe de Estado” para describir lo que considera que ocurriría si la Suprema Corte revisa controversias sobre la reforma judicial.
Un golpe de Estado es definido como una actuación violenta, ya sea por parte de fuerzas militares o grupos rebeldes, que toman el gobierno de un Estado nación, sacando a las personas gobernantes. Es una toma ilegal del Poder de un país.
Al existir también dos suspensiones contra la reforma, que ordenan al INE no organizar la elección y al Senado no emitir la convocatoria, expresó coincidencia en que podría llevar a una crisis de constitucionalidad.
“Bueno, esto lo que puede provocar es una crisis de constitucionalidad porque hay quienes están dispuestos, por la vía de los hechos, a no respetar las resoluciones de otros órganos del Estado. Yo espero que no lleguemos al extremo de una crisis constitucional”.
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