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El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) publicó este 9 de octubre los datos que señalan que la inflación general anual en México en el noveno mes del año se desaceleró, ubicándose en 4.58%, con lo que ligó dos meses con descenso y quedando en evidencia que las políticas antinflacionarias del gobierno de la Cuarta Transformación (4T) y las acciones del Banco de México han sido efectivas.
La variación mensual se explicó en gran medida por el aumento estacional del inicio del ciclo escolar, que incrementó la demanda de útiles escolares, uniformes entre otros, así como mayores precios de tarifas y mercancías no alimenticias, sin embargo, estos aumentos fueron parcialmente compensados por disminuciones en los precios de productos agropecuarios.
El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) general se desaceleró en septiembre de 4.58% anual en septiembre, desde 4.99% al cierre de agosto de este año, lo que significa que se está muy cerca de la inflación objetivo del Banco de México para este año.
La inflación del noveno mes del 2024, mostró un incremento mensual de 0.05%, mientras que la inflación subyacente, la que excluye de su medición los productos de alta volatilidad en sus precios como son los combustibles fruta, verduras presentó un aumento del 0.28%, en comparación con el mes anterior y 3.91% a tasa anual.
El Índice Nacional de Precios al Consumidor subyacente es el que más preocupa a los analistas porque es en este donde se encuentra el componente de los alimentos elaborados, por lo que son los que más castigan a los consumidores de más bajos ingresos y es el que sigue el Banco de México para la toma de decisiones para el manejo de la política monetaria y si sube o baja la tasa de interés.
La inflación no subyacente que sí toma en cuenta los productos de alta volatilidad como son los combustibles, frutas, verduras y pecuarios marcó una disminución de precios de menos 0.71% mensual y de 0.56% anual. A tasa anual, el índice de precios no subyacente se ubicó en 6.50% desde 8.03% en agosto.
Los precios de los productos agropecuarios bajaron 1.65%, mientras que los de energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno subieron marginalmente en 0.03% en el noveno mes del 2024.
Evitar que los precios al consumidor suban es una tarea primordial ya que la inflación es un impuesto regresivo que afecta más a los sectores más vulnerables de la sociedad.
El aumento continuo de los precios de los productos y servicios propicia que los costos de las mercancías sufran variaciones frecuentes e irregulares que afecta el consumo de las familias. Cuando pasa esto se genera una asignación ineficiente de recursos en la economía, lo que afecta negativamente la competitividad y el bienestar de la misma.
Un entorno de inflación alta e incierta aumenta la frecuencia e intensidad de los ajustes en los precios, lo que a su vez reduce los horizontes de planeación de los las empresas y la economía de las familias, afectando sus decisiones de ahorro, gasto e inversión.
La política antinflacionaria que aplicó el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador está funcionando y el 2º piso de la Cuarta Transformación que encabeza la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo seguirá con esta política económica, que ha probado que ha dado resultados.
Dado que hay una tendencia a la baja de la inflación es muy probable que, en la próxima reunión del Banco de México, se disminuya la tasa de interés de referencia del país con lo que se contribuirá a que el costo del dinero para créditos baje lo que será una magnifica noticia para los consumidores.
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