El robotaxi de Tesla enfrentará preguntas y escrutinio en su presentación esta semana​

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Forbes México.
El robotaxi de Tesla enfrentará preguntas y escrutinio en su presentación esta semana

Tesla se enfrentará a un momento decisivo el jueves cuando su director ejecutivo, Elon Musk, suba al escenario en el estudio Warner Bros Hollywood para revelar sus planes, muy retrasados, de un robotaxi, un proyecto que ha reavivado las acciones del fabricante de vehículos eléctricos, a pesar de las expectativas de enfriamiento para el crecimiento de los vehículos eléctricos.

Musk ha dicho que el robotaxi de Tesla, llamado Cybercab, será un nuevo modelo de vehículo que puede conducirse solo y funcionar en una plataforma de viajes compartidos de Tesla. Tesla también permitirá a los propietarios ganar dinero con sus autos al ponerlos en la red de viajes compartidos como taxis autónomos, lo que ha llamado una “combinación de Airbnb y Uber”.

Tesla se basa en cámaras e inteligencia artificial para conducir los autos actuales, con supervisión del conductor, pero sin el costoso hardware adicional asociado con los sistemas de radar y la tecnología lidar que utilizan otros actores del mercado de robotaxi.

Musk espera que mejorar esta tecnología le permita entrar en una industria aún incipiente y fuertemente regulada que ha resultado en miles de millones de dólares en pérdidas para otros.

Los inversores, atraídos por la estimación de Musk de que el negocio de taxis robotizados de Tesla podría elevar la valoración de la empresa a 5 billones de dólares desde los 750,000 millones actuales, quieren ver un prototipo y saber con qué rapidez Musk puede producirlo en masa, obteniendo beneficios. Quieren entender los obstáculos regulatorios y cómo el FSD, todavía categorizado como un tipo de automatización parcial, puede llegar a ser más seguro que un conductor humano.

“Tienen que ponerse en marcha porque esto se ha discutido, rumoreado, hablado y anunciado de diversas formas durante un tiempo”, dijo Elliot Johnson, director de inversiones de Evolve ETFs, que gestiona inversiones en Tesla. No espera que nada de lo anunciado el jueves tenga un impacto financiero durante uno o dos años.

Musk dijo en 2019 que estaba “muy seguro” de que la compañía tendría robotaxis operativos para el año siguiente. Este año archivó los planes para un vehículo nuevo y asequible en un giro brusco hacia los robotaxis. Tesla “debería ser considerada una empresa de robótica con inteligencia artificial”, no un fabricante de automóviles dijo.

Pocos observadores, si es que hay alguno, esperan un producto completamente funcional.

“Creemos que el evento de robotaxi tendrá mucho de visión y poco de resultados inmediatos o impulsores de ingresos adicionales”, dijo el analista de Bernstein Toni Sacconaghi en una nota de investigación. “La compañía tiene un historial, particularmente en FSD, de ser demasiado optimista y hay un gran misterio en los detalles”.

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El robotaxi de Tesla enfrentará preguntas y escrutinio en su presentación esta semana

Tesla también podría dar detalles sobre versiones más económicas de su línea actual, así como actualizar a los inversores sobre sus robots humanoides, Optimus, dijo.

Hay grandes esperanzas depositadas en este evento, llamado “Nosotros, Robot”, en un aparente guiño a la colección de cuentos de ciencia ficción “Yo, Robot” del escritor estadounidense Isaac Asimov.

Las acciones de Tesla, afectadas en los últimos años por las preocupaciones de que sus rivales de vehículos eléctricos con modelos más baratos y nuevos estén comiéndole cuota de mercado, han subido casi un 50% desde abril, cuando Musk anunció el cambio a los robotaxis. Aun así, las expectativas de volatilidad en las acciones de Tesla durante los próximos 30 días están cerca de un máximo de dos años, impulsadas principalmente por las incertidumbres en torno al evento de los robotaxis, según los datos de opciones de Trade Alert.

Llevar vehículos autónomos al mercado ha demostrado ser una tarea costosa y que requiere mucho tiempo para otras empresas.

Waymo es la única empresa estadounidense que opera robotaxis sin tripulación que cobran tarifas. Otras empresas que aún están en la carrera son General Motors con Cruise, que relanza robotaxis con un conductor de seguridad después de que un accidente el otoño pasado lo obligara a detener sus operaciones, y Zoox, que está ampliando las pruebas de sus taxis autónomos que vienen sin volante ni pedales. 

Para mantener los costos de Tesla bajo control, Musk decidió mantenerse alejado de los sensores más allá de las cámaras y potencialmente podría desarrollar la primera generación de Cybercab en su plataforma existente que ejecuta el Model 3 y el Model Y.

Tesla también obtiene aprendizajes de los datos que recopila de millones de vehículos.

Pero los inversores y analistas dijeron que no será fácil pasar de la tecnología FSD actual (que ha sido objeto de un mayor escrutinio regulatorio y legal con al menos dos accidentes fatales) a niveles más altos de automatización que no requieran la supervisión del conductor.

“Creemos que esto todavía está a varios años de distancia y que numerosos obstáculos tecnológicos, pruebas de seguridad y aprobaciones regulatorias aún se interponen en el camino”, dijo el analista de CFRA Research Garrett Nelson, destacando “una creciente desconexión entre la elevada valoración de las acciones y la realidad de que el crecimiento de las ganancias de Tesla ha chocado contra un muro”.

Con información de Reuters.

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